ALERGIA A LAS VENTANAS EMERGENTES

Ya sé que estás hart@ de que, mientras navegas por internet, te aparezcan ventanas emergentes que no has pedido y que no vienen a cuento de lo que estás buscando en ese momento.
Muchos lo estamos también.
Estás deseando que aparezca una opción en tu programa navegador favorito para que te permita, de una vez por todas, configurarlo con una opción que diga algo así como "NO MOSTRAR VENTANAS POP-UP NUNCA MÁS".
Magia.
Y cuando aceptas esta opción parece como que descansas. Ni siquiera te importa el mensaje que dice cómo deshacer esta configuración, ya que, a tu buen entender, nunca la vas a deshacer.
Hasta que un buen día alguien te manda un correo electrónico que, aparte de comunicarte información que puedes leer ahí mismo en su cuerpo de mensaje, contiene un enlace o un botón que, aparentemente, no hace nada cuando lo pulsas. Y sigue sin hacer nada ninguna de las 20 veces que lo pulsas.
Te dices a tí mism@: "Todo va bien, yo ya le he dado a ACEPTAR 20 veces. Será que el programa funciona así, sin comunicarme nada después de aceptar."
Esto también te puede pasar con una página web convencional, no solo con un correo electrónico.
Y pasan varios días hasta que te enteras de que algo no funcionó: No te suscribiste al boletín informativo, o no te envían la pegatina, o no te apuntaste al cursillo, o no te descargaste la imagen o el archivo pdf que te enviaban, o no puedes firmar tu declaración de la renta online, o no lo que sea que hace una semana que deberías haberlo aceptado o recibido.
He de decirte que ese botón ACEPTAR que pulsaste tropecientas veces debería haberte mostrado una ventana emergente en tu navegador, acción que tu navegador no ejecuta porque lo has configurado para que no te muestre ventanas emergentes.
En realidad puede que te muestre algo: un pequeño botoncito en alguna parte (cada navegador, si lo hace, lo muestra en alguna esquina por ahí) que te pretende indicar que hay una ventana emergente que no se ha mostrado. Un pequeño botoncito que es tan pequeño que ni siquiera llama la atención en nuestra vista.
Y ahí estás, sufriendo tu decisión de descansar de ventanas emergentes con aquella configuración mágica.

Y, por otro lado, entraste alguna vez en alguna web que, para acceder al contenido que buscabas, tuviste primero que aceptar notificaciones o la instalación de algún plug-in o añadido a tu navegador (o la instalación de algún programa con virus), y ahora te asaltan ventanas emergentes y notificaciones de temas variopintos que ya, ni siquiera con la configuración mágica, puedes prohibir.

Ya lo sé, la configuración mágica es tentadora. Yo soy alérgico a casi todos los tipos de polen, y a veces no me puedo resistir a oler alguna flor de aroma mágico, largo y tendido. Luego toca arramblar con las consecuencias de la magia.






blog71 - ALERGIA A LAS VENTANAS EMERGENTES - - -SUSCRIPCIONES - - -http://www.rojasdelgado.com