El sistema operativo arrancará si está instalado en una partición, llamada PARTICION DE ARRANQUE, que tiene que ser:

• primaria. No sirven particiones extendidas, ni unidades lógicas dentro de particiones extendidas.
• activa. En un disco duro se marcará una única partición como activa para que sea el sistema operativo instalado en ella el que tome el control al arrancar.
  • En los sistemas con varios discos, la configuración de la BIOS mantiene una lista de discos que establece prioridades de arranque, es decir, en qué orden se deberá buscar la partición activa en dicha lista de discos. El sistema operativo que arrancará será el que esté en la (única) partición activa del primer disco de la lista que tenga una partición activa. Se ignorarán los discos no presentes, los discos presentes no particionados y los discos presentes particionados que no tengan ninguna partición activa.
  • Actualmente las BIOS permiten pulsar F12 al arrancar, mostrándose una lista de particiones primarias de todos los discos del sistema, y pudiendo elegir, para ese arranque, con qué disco y qué partición de éste se quiere arrancar. Es como si se marcara como activa la partición elegida, pero en realidad la partición activa de los discos no se ha cambiado.